La importancia de tomar y recabar datos, sobre todo lo que relaciona a la perdiz, es de fundamental importancia para entender la especie y para saber que está sucediendo en nuestro campo.
El Dr. Jesús Nadal, desde un principio me marcó una serie de pautas para determinar sexo y edad, muestras biológicas y demás cosas, que desde mi punto de vista de "bichero", sólo pasaba horas en el campo, viéndolas, escuchándolas, observando atónito como la primavera estallaba, como se sucedían los emparejamientos primero y los nacimientos después,…. Ummmm aún noto al escribir estas líneas, el olor a romero o estoy oyendo al triguero desde la espiga de un trigal. ! Que privilegio pisar el campo y ser consciente de la vida que allí lo pobla!.
Pero..., saber estas cosas que Jesús me enseñó, hizo que además de ser un afortunado por la naturaleza que me rodea y cuido, que entienda si los procesos que practicamos, funcionan.
Las cuatro edades de la perdiz, las podríamos citar en:
-Perdigones, juvenil de primer año, juvenil de segundo año y adultos.
-Los perdigones son pollos hasta las dos primeras semanas de vida, cubiertos de plumón.
-Juvenil de primer año son pollos mudando del tamaño de un adulto, presentan las rémiges 1ª y 2ª con manchas blancas , que no mudarán hasta el siguiente año.
-Juveniles de segundo año perdices hasta 15-16 meses, que todavía presenta manchas en las dos primeras rémiges y se ven mudando las otras.
-Adultos son perdices sin ninguna pluma de joven, con las dos primeras rémiges ya mudado.
Lo importante de saber el estado de muda de las plumas, es que utilizando una cronología a la inversa, podremos tener una estadística de cuando están naciendo las perdices en nuestro campo, con esta información tenemos una herramienta de peso para poder explicar la importancia de retrasar unos días la cosecha, al agricultor de la zona.
La determinación del sexo, es relativamente más fácil, machos por lo general más grandes, de mayor peso y muestran espolones en ambas patas.
Con la edad y el sexo podremos hacer el age ratio y el sex ratio, donde arrojarán unos números que indicarán claramente, si la población está creciendo o no, y cuantos animales se pueden cazar o no, además de ayudarnos a fijar unos objetivos de capturas.
Ojalá pudiera encender un poquito, una llama dentro vuestra para lanzaros a partir de ahora, a recoger estos datos, que conseguirá que vuestra experiencia de campo sea más plena y además ayude a esta maravillosa especie.
Fernando Granado Font.
Colaborador con el Doctor en Biología Animal Jesús Nadal de la universidad de Lérida en varios proyectos:
1 Naturaleza y biodiversidad en medios agroganaderos: El Bosc del Siscar.
2 Coturnix.
3 Educación para la caza sostenible.
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